Artículo del Dr, Joseph Mercola
El fabricante de vacunas AstraZeneca reportó la primera semana de septiembre que habían detenido de manera temporal sus ensayos clínicos de vacunas contra el COVID-19 porque al parecer, un paciente sufrió reacciones neurológicas graves.
El participante experimentó síntomas consistentes con mielitis transversa, una inflamación rara de la médula espinal, reportó la Associated Press. Días después, AstraZeneca reanudó los ensayos ya que decidió que las enfermedades "se consideraban poco probables para estar relacionadas con la vacuna o no había suficientes pruebas para afirmar que las enfermedades estaban o no relacionadas con la vacuna".
Un dato curioso de la historia es que el informe fue referenciado en plural, al usar “voluntarios” y “enfermedades”, en lugar de verbos y sustantivos singulares. Esto probablemente sea porque el aplazamiento de septiembre no haya sido la primera vez en que AstraZeneca detuvo los ensayos
Resulta que detuvieron los ensayos en julio cuando otro participante sufrió problemas neurológicos, pero esos eventos se atribuyeron a un caso de esclerosis múltiple que no se había diagnosticado antes.
Dado a que AstraZeneca ha tenido al menos dos informes de acontecimientos neurológicos graves en relación a las pruebas de la vacuna contra el coronavirus, crea la duda de si existen otras reacciones adversas que AstraZeneca no haya hecho públicas y, si las hay, ¿cuáles son y cuántas hay?
Fuente:
Reuters
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